El Ayuntamiento de Alicante ya ha puesto en marcha el operativo especial del Servicio de Prevención y Extinción de Incendios para Hogueras. Este año por primera vez ha dado comienzo un Plan de inspecciones previas, según informa el diario digital el Periódico de Alicante.
Por su parte, el mando del Operativo de Hogueras del SPEIS, David Moratilla, ha explicado que equipos de cuatro bomberos del SPEIS, han participado en una primera fase del Plan de Seguridad de las Hogueras, y del 20 de mayo hasta hoy 3 de junio, han recorrido todas las ubicaciones donde se plantarán las Hogueras para “garantizar la accesibilidad, la ubicación de los monumentos, revisar los hidrantes y establecer medidas preventivas para reforzar más este año la seguridad”.
La segunda fase del Plan de Bomberos se podrá en marcha a partir del próximo día 18 de junio donde revisarán que todas las hogueras cumplen los planes de seguridad en la plantá de sus monumentos, y técnicos especializados de bomberos los inspeccionaran para asegurar que no contienen hierro en sus estructuras y se han plantado correctamente.
Estos equipos de entre tres y seis bomberos recorrerán la ciudad en varios turnos por la mañana y tarde para revisar tanto la ubicación del monumento, en su planta, como el cierre de la zona mínima de seguridad que se recomienda.
Fuentes del consistorio destacaron que “la seguridad es prioritaria para el Ayuntamiento, y con la prevención y las inspecciones, los bomberos comprobarán que se cumplen las medidas y condicionantes que son fundamentales para prevenir cualquier incidente. Si se detecta algún problema o que no cumplen con lo establecido en el plan, se resolverá con celeridad’.
Asimismo informaron que esta semana se está ultimando las reuniones para tener preparado todo el dispositivo: “El trabajo previo es lo más complicado para tenerlo todo coordinado y que podamos disfrutar de unas hogueras excelentes, en las que los artistas y los comisionados hacen un gran esfuerzo, respetando y haciendo un buen trabajando en los plazos estipulados de forma coordinada para que se levanten todos los monumentos’.
Los bomberos del SPEIS revisarán todos los monumentos con el objeto de que se respeten las distancias superiores a 4 metros, respeto a cualquier fachada de edificio desde la envolvente que compone el perímetro de la hoguera, y cualquier incidencia que pueda acontecer. También se revisarán la disposición y operatividad de todos los hidrantes.
Según fuentes del SPEIS se ha establecido una zona de seguridad cuyo perímetro está delimitado, mediante vayas, con un radio entre 6 y 12 metros dependiendo del plan de actuación de cada hoguera, siempre con respecto al eje central que define el ámbito superficial en el que no deberá existir tránsito ni presencia de personas, salvo para el personal dedicado a la plantá, mantenimiento y seguridad, en su caso, de la Hoguera.
Cada hoguera tiene su propio plan de seguridad, diseñado a medida en el que se indica donde tienen que plantar, en qué ejes y cuáles son las zonas que deben quedar despejadas. Con las inspecciones se evitan incidentes, y a su vez se logra prevenir que se respetan todos los planes y se puedan disfrutar de unas hogueras con seguridad.