Sus rostros, sus nombres y sus reflexiones tras vérselas cara a cara con las llamas... Los afectados por los incendios en Gran Canaria son los protagonistas de la campaña 'Visita la Cumbre, consume Gran Canaria' que el diario La Provincia ha iniciado esta semana para revitalizar la actividad económica en las áreas cumbreras y de medianías donde las llamas devoraron 8.500 hectáreas arrasando no sólo con el paisaje grancanario sino también, con los sueños y el sustento de cientos de hombres y mujeres de ocho municipios, según informa el diario digital La Provincia.
'Visita la cumbre, consume Gran Canaria' busca, además, precisamente concienciar a la ciudadanía de la importancia que tiene hoy por hoy comprar lo nuestro. "Es el momento de recuperar nuestro campo", explica el apicultor de Artenara Francisco Díaz Díaz, de 69 años, y el primer protagonista de esta iniciativa solidaria.
Aunque las pérdidas están aún por cuantificar y las heridas de la llamas tardarán en cerrarse, la realidad del campo de Gran Canaria, de municipios emblemáticos como Artenara, Tejeda o Valleseco y Gáldar es, en estos momentos, de desesperanza. 'Visita la cumbre, consume Gran Canaria' trata de animar a la ciudadanía para que apoye a los afectados de la manera más sencilla posible, que es volviendo al campo, al medio rural que tanto sacrificio supone y que tan necesitado está de cariño. Hoy más que nunca.
Para los empresarios de zonas como las cumbres de Agaete y Gáldar o Artenara y Tejeda el fuego ha sido tan demoledor en su economía que algunos se han visto obligados a despedir personal de sus negocios porque el previsible aumento de turistas habitual en agosto ha quedado reducido a cero a raíz de los incendios. "Y nuestro miedo es que no quieran volver porque se ha quedado todo el campo negro, destruido", añade otra afectada.
"Necesitamos cariño pero sobre todo necesitamos la paciencia de quienes se animen a visitarnos", reconoce Juanate Gil Falcón, ecoempresaria de Artenara y otro de los rostros que, a lo largo de las próximas semanas, ocuparán las páginas de La Provincia para recordar a todos con su relato que el campo existe.
Alexander Jorge, emprendedor de 20 años, de Gáldar, desde su juventud y tras el fuego que, en su caso, le obligó a ser evacuado y mantener cerrado su negocio cuatro días, pide "una segunda oportunidad para los jóvenes que queremos vivir del campo".
El incendio de Gran Canaria se ha llevado por delante buena parte de un sector primario que desde hace décadas pide un poco más de atención. La ganadería ha sido la gran afectada por el fuego pero ahora viene lo peor, según los propios perjudicados, porque los animales no tienen ahora donde pastar. "Y a base de piensos no sale rentable tener animales", explicaba Victoriano Cubas, de 86 años, en El Hornillo, en Agaete, que afirma no haber visto "en toda mi vida un fuego como el de esos días". "El fuego no trae vida sino muerte", dice en otro momento de la entrevista mientras recorta con una hoz las ramas de unas bolas de ceniza negra a las que quedaron reducidos sus cultivos.
Los pequeños productores de miel y almendras también han visto desaparecer buena parte de su futura producción, ya que recuperar lo perdido les llevará mucho tiempo. Tampoco dejó el devastador fuego de lado a los queseros, que verán mermada su producción ya que los animales, sin pastos donde alimentarse, no darán tanta leche.
La campaña de 'Visita la Cumbre, consume Gran Canaria' tendrá también presencia en www.laprovincia.es, la edición digital del periódico, a través de piezas de vídeos donde los afectados reflexionan sobre las necesidades que ahora el campo y sus miles de habitantes precisan.
Imagen: Econoticias
