Los mayores de 70 años que opten a ellos recibirán un curso de formación. Se repartirán casi 600 sensores para intentar prevenir los incendios domésticos, según informa www.elperiodicodearagon.com
Los Bomberos de Zaragoza repartirán antes de que acabe el año 591 detectores de humo entre todos aquellos ancianos de más de 70 años que vivan solos para prevenir incendios domésticos. Para optar a uno de estos sensores, los interesados deberán acudir a algunas de las charlas divulgativas que se convocarán en los próximos días y proporcionar sus datos personales.
El servicio de prevención se gestará con la colaboración de la concejalía de Derechos Sociales y Ciudadanía. Si en estos meses el reparto de los detectores, para los que se ha firmado un convenio de 17.800 euros, cumple con las previsiones, no se descarta que se pueda ampliar a otros sectores de la sociedad que cumplan algún perfil de riesgo.
De hecho, la intención del servicio de extinción municipal durante este primer periodo es la de tener "manga ancha" y atender cada una de las peticiones en función de las necesidades. Es decir, si un anciano no vive solo, pero está a cargo de una persona con dependencia, no descartan ofrecer el servicio con la misma gratuidad.
Los detectores de humo se instalan en las zonas de la vivienda en la que generalmente se producen más incendios fortuitos empezando por el dormitorio, siguiendo por el salón y acabando en la cocina. Los últimos datos estatales publicados, que corresponden al 2016, consignaron un número de 175 personas fallecidas a causa de las llamas, un alto porcentaje de ellas de avanzada edad.
Bomberos de Zaragoza proporcionará también un curso de prevención a las personas mayores que soliciten los detectores. Estos se impartirán principalmente en las instalaciones de las que disponen en el Museo del Fuego y en varias charlas en una treintena de centros de mayores. Además se les proporcionarán folletos informativos.
Entre los consejos que se les brinda está el de abandonar lo más rápidamente posible las habitaciones en las que suene la alarma por una acumulación de monóxido de carbono, dejar las puertas bien cerradas y avisar a las fuerzas de seguridad. En ningún caso se les pide que usen extintores o mantas para sofocar las llamar por el riesgo que pueden correr a causa de su movilidad reducida.
El reparto gratuito de detectores de humo fue impulsado por los bomberos de la Diputación de Zaragoza (DPZ) en el 2016 a través del proyecto Hogar Seguro. En su primer año se colocaron 130 sensores en las viviendas más sensibles y se desarrolló un plan de inspección para evitar escapes de gas o posibles focos de riesgo.
Este nuevo reparto gratuito de detectores se incluye dentro de las medidas que las diferentes administraciones están desarrollando para prevenir el repunte de muertes en soledad de los últimos meses.
